Perro bebe mucha agua: causas principales y qué hacer

Que un perro deje de beber agua de repente asusta, pero si un perro bebe mucha agua (o al menos más de la habitual), también es motivo de preocupación. Aunque puede deberse a motivos inofensivos, como el calor, el exceso de sed también puede ser signo de un problema de salud más serio. Sigue leyendo para saber los motivos por los que un perro bebe mucha agua y qué hacer al respecto.

Averigua cómo pasa el tiempo tu perro.

Más información

¿Cuánta agua necesita beber un perro al día?

La cantidad de agua que necesita beber un perro depende de distintos factores, como su tamaño, el nivel de actividad, la dieta, la etapa de la vida en la que se encuentre y del clima en el que viva. La mayoría de los perros necesitan aproximadamente una onza de agua limpia por cada libra de peso corporal al día¹. En términos métricos: de 60 a 80 ml de agua por kilogramo².

Puedes tomar como referencia esta guía que creamos para saber cuánta agua necesita beber tu perro al día según su tamaño, nivel de actividad, temperatura y tipo de comida:

En caso de duda, ponte en contacto con tu veterinario para saber cuánta agua debería beber al día tu perro.

¿Cuánta agua es demasiada para que un perro beba en un día?

En general, se considera que un perro tiene sed excesiva (lo que se conoce como polidipsia en el mundo de la medicina) cuando bebe más de 100 ml por kg de peso corporal al día. No obstante, la cantidad exacta de agua al día que se considera «demasiada» varía de un perro a otro, en función de los factores que hemos mencionado anteriormente. No olvides que cada perro es un mundo y tiene sus necesidades.

5 razones inofensivas por las que un perro bebe mucha agua

Los perros, al igual que los seres humanos, pueden tener más o menos sed a lo largo del día. Además, en ciertas situaciones (una perra amamantando a su camada) beberán más. Por lo tanto, para no preocuparte en exceso, vamos a ver 5 razones inofensivas por las que un perro bebe mucha agua:

1) Clima caluroso

Si hace calor, es normal que tu perro beba más agua de la habitual.

El calor afecta a los seres humanos y a los perros. Si tu perro tiene calor, puede jadear más de lo usual, lo que le hace perder humedad de la lengua, la garganta y las vías respiratorias. Esto le ayuda a refrescarse, pero también puede provocar una mayor pérdida de líquidos, lo que hace que tenga más sed.

Si hace calor, asegúrate de que tu perro tenga acceso a agua fresca y a zonas con sombra en todo momento. Y toma medidas para evitar el acaloramiento o el golpe de calor en perros.

2) Aumento de la actividad física

El aumento de la actividad física o ejercicio también puede hacer que un perro beba mucha agua.

⚠️ No todos los perros responden igual de bien a un aumento de la actividad, algunos incluso pueden presentar dificultades para respirar o tener demasiado calor cuando vais a correr o de excursión.

Asegúrate de:

• Adaptar tu actividad a la edad, la forma física y la raza de tu perro.
• Encontrar un equilibrio. Si tu perro se ejercita poco, puede acabar desarrollando sobrepeso y enfermando. Si se ejercita demasiado, puede lesionarse o terminar desarrollando enfermedades que afecten a su movilidad, como artritis.
• Parar a beber agua muchas veces y calentar bien antes de empezar.

💡Un monitor de actividad para perros puede servirte para establecer objetivos de actividad diarios y para detectar si cambia su nivel de actividad.

3) Adiestramiento mental

Mantener a tu perro mentalmente activo es una de las mejores inversiones que puedes hacer en su salud y bienestar. Cosas como:

• Enseñarle nuevos trucos
• Repasar su adiestramiento de obediencia
• Probar nuevos métodos de adiestramiento, como el adiestramiento con clicker
• Invertir en puzles de comida y juguetes interactivos
• Pasar más tiempo con otros animales y personas

No obstante, la estimulación mental también puede hacer que los perros se sientan más sedientos.

¿Por qué? Porque al igual que nosotros, el cerebro de los perros está compuesto mayormente de agua.

Y cuanto más les obligues a utilizar el cerebro de formas nuevas y diferentes, más agua gastarán.

4) Cambios en la dieta

Si has pasado de la comida húmeda a la seca o, si en general, has cambiado la dieta de tu amigo de cuatro patas, es posible que acabe teniendo más sed. Los alimentos secos suelen hidratar mucho menos que los húmedos. Así que no te extrañes si tu perro va al bebedero con más frecuencia.

Solo asegúrate de comentar cualquier cambio con tu veterinario de antemano, para saber si le estás dando a tu amigo lo suficiente para velar por su salud y felicidad.

Medicamentos

Algunos medicamentos pueden hacer que tu perro orine más, lo que hace que beba más agua para compensar la pérdida. Incluidos:

• Diuréticos: se suelen utilizar para tratar problemas del corazón y del riñón.
• Glucocorticoides: se suelen utilizar para tratar inflamaciones y alergias.
• Anticonvulsivos: se utilizan para tratar los ataques epilépticos en perros. Pueden afectar a los riñones del perro o alterar el equilibrio electrolítico.
• Medicamentos psicotrópicos: se utilizan para tratar trastornos del comportamiento. Estos pueden afectar al sistema nervioso central de tu perro o afectar indirectamente a su metabolismo o a la excreción de orina.

Si tu perro se medica, monitoriza si tiene más sed y coméntaselo a tu veterinario. Esto te ayudará a saber si que tu perro beba más agua es normal o causa de preocupación.

5 causas médicas del exceso de sed en perros

Una vez descartados el clima, el ejercicio, el adiestramiento y la medicación, he aquí algunos problemas de salud fáciles de pasar por alto que pueden hacer que tu perro beba más agua de lo normal.

1) Diabetes mellitus

Los perros también pueden desarrollar diabetes, en especial cuanto más mayores son, o si padecen sobrepeso.

Cuando un perro padece diabetes, su organismo no transporta correctamente el azúcar de la sangre a las células (para obtener energía), lo que puede provocar un aumento del azúcar en sangre y de la sed. También puede que tu perro pierda peso sin haber cambiado de dieta.

2) Problemas gastrointestinales

Le quitas los ojos de encima un segundo y tu perro se ha comido algo que no debería. Y dependiendo de lo que sea, incluso puede ser letal.

Así que, además de saber qué alimentos están prohibidos para tu amigo de cuatro patas, házselo saber también a tus amigos y seres queridos. De este modo, evitarás que alguien le dé de comer a tu perro algo potencialmente peligroso por accidente.

Si no consigues actuar a tiempo, tu peludo puede acabar con dolor de estómago, vómitos o diarrea. Todo esto le hace perder líquidos e incluso acabar deshidratado, lo que le lleva a beber más agua para compensar la pérdida.

CONSEJO PRO: Puedes usar un GPS y monitor de salud para perros para monitorizar la actividad, el sueño y el paradero de tu peludo. Con un localizador para perros, podrás hacer un seguimiento de la salud de tu perro, y recibirás avisos de salud para detectar problemas de salud a tiempo.

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3) Enfermedades hepáticas y urinarias

El hígado, la vejiga y los riñones de tu perro desempeñan un papel importante en el equilibrio hídrico de su cuerpo. Así que si tu peludo tiene una infección en alguno de ellos, puede que:

• Orine más de lo habitual (pero también en cantidades más pequeñas).
• Presente sangre en la orina.
• Orine por casa.
• Tenga el abdomen distendido, hinchado y sensible al contacto.

Todas estas enfermedades pueden hacer que tu peludo beba más para eliminar las toxinas.

4) Infecciones

Diferentes tipos de infección (incluidas las infecciones víricas y bacterianas que provocan fiebre) pueden provocar que tu perro tenga más sed.

5) Síndrome de Cushing

Esta afección provoca una sobreproducción de cortisol (la hormona del estrés), que puede afectar al metabolismo del perro y hacer que beba más.

Perro mayor que bebe mucha agua

Desafortunadamente, no suele ser buena señal cuando un perro mayor empieza a beber mucha agua. Un exceso de sed en perros mayores suele ser indicio de un problema de salud, como:

• Infección o insuficiencia renal
• Insuficiencia hepática
• Diabetes mellitus
• Enfermedad de Cushing
• Deshidratación
• Infección de la vejiga
• Infección del útero (piometra)
• Calcio sanguíneo elevado
• Glándulas suprarrenales o tiroides hiperactivas

Si no se tratan, estas enfermedades pueden ser mortales. Pide cita a tu veterinario de inmediato si notas que tu perro mayor empieza a beber más agua.

¿Qué hacer si tu perro bebe mucha agua?

Si tu perro bebe mucha agua, mucha más de la habitual, haz lo siguiente:

• Nunca restrinjas el agua: reducir el acceso al agua a tu perro puede empeorar la deshidratación y los problemas subyacentes.
• Controla la dieta: opta por golosinas bajas en sodio y prueba a cambiar a una dieta rica en humedad (como la comida húmeda). Consúltalo con tu veterinario primero siempre.
• Mantenlo fresco: si hace calor, busca lugares con sombra, dale agua fresca y haced parones para evitar golpes de calor.
• Revisiones veterinarias periódicas: las revisiones rutinarias pueden detectar posibles problemas a tiempo y mantener sano a tu peludo.

¿Cuándo hay que preocuparse?

Aunque beber de más en un día caluroso es normal, ponte en contacto con tu veterinario si:

• Tu perro bebe en exceso durante más de 24-48 horas.
• Orina con más frecuencia o tiene accidentes en casa.
• Pierde peso, vomita o tiene letargo.

Detectar estos síntomas a tiempo puede marcar la diferencia en la salud de tu perro.

La tecnología que te ayuda a controlar la salud de tu perro

¿Sabías que los veterinarios recomiendan hacer un seguimiento de la actividad diaria de tu perro? La razón es que un cambio repentino en los niveles de actividad o en los patrones del sueño puede ser señal de que algo no va bien.

Gracias a los avisos de salud de Tractive, puedes detectar cambios inusuales en el comportamiento de tu perro, como una mayor inquietud o una inactividad repentina. El sencillo dispositivo de seguimiento para perros te avisa en el momento en que se produce un descenso notable en la actividad de tu perro, para que puedas tomar medidas y llevarlo al veterinario para una revisión.

Controla el bienestar de tu perro

Descubre cómo está de un vistazo con el indicador de bienestar. Establece objetivos. Compáralo con perros como el tuyo. Monitoriza su sueño. Detecta problemas y vela por su salud.

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Intoxicación por agua en perros: qué hay que tener en cuenta

También es importante tener en cuenta la intoxicación por agua, es decir, cuando el perro ingiere demasiada agua (o agua contaminada). Si el perro ingiere al menos un tercio de su peso corporal en agua, puede correr el riesgo de sufrir una intoxicación por agua. Cuando esta cantidad de agua entra en el torrente sanguíneo, puede alterar el equilibrio electrolítico del organismo, sobre todo los niveles de sodio. Si no se trata, puede provocar la muerte.

Signos de intoxicación por agua en perros

Si crees que tu perro ha ingerido más agua de la que puede soportar, puede ser mortal si se te escapa. Así que asegúrate de estar atento a estas señales:

• Abdomen distendido
• Mucosas pálidas
• Salivación excesiva
• Pupilas dilatadas
• Somnolencia
• Vómitos
• Micción incontrolada
• Fasciculaciones musculares
• Parecer aturdido o descoordinado

¿Qué debo hacer si mi perro bebe mucha agua?

La intoxicación por agua es una emergencia. Si notas estos síntomas, lleva a tu perro al veterinario lo antes posible. Si puedes, llámalo con antelación para que estén preparados para tu llegada.

De camino al veterinario, dale a tu perro algo salado para comer, como palitos de sal o galletas saladas, si tienes a mano.

Prevención de la intoxicación por agua en perros

Si convives con un perro que adora estar en el agua, no está de más que:

• Vigiles cuánto ha estado nadando o simplemente en el agua.
• Te asegures de que descansa lo suficiente.
• Vigiles los signos de intoxicación por agua o sobreesfuerzo.
• Utiliza un frisbee o un sustituto seguro del palo para buscar en lugar de una pelota (para que tu perro no tenga que mantener la boca tan abierta al saltar).
• Monitoriza la ubicación de tu perro para evitar que deambule (sin supervisión) por una zona llena de piscinas, estanques o lagos.

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