¿Por qué duerme mucho un gato? Te explicamos sus hábitos de sueño

¿Por qué duerme mucho un gato? ¿La cantidad de horas que duerme es normal? ¿Cuántas horas debe dormir un gato? ¿Dormir mucho puede ser indicio de una enfermedad seria? ¡Cuántas preguntas! Por suerte, tenemos todas las respuestas. Descubre todo lo que necesitas saber sobre los hábitos de sueño de un gato: cuántas horas duerme, cómo puede variar en función de la edad y la mejor manera de hacer un seguimiento del sueño de tu felino.

¿Por qué duerme mucho un gato?

Al igual que nosotros, los gatos necesitan dormir para sobrevivir. Dormir con regularidad repone el cuerpo para el día siguiente y refuerza la memoria y el sistema inmunitario. Los distintos tipos de sueño, incluidos el NREM y el REM, favorecen diversas funciones del cuerpo.

Los gatos duermen muchas horas a lo largo del día. De este modo, ahorran la energía que utilizarían en la naturaleza para cazar, perseguir y atrapar su siguiente comida. Al fin y al cabo, los gatos son cazadores innatos (su instinto de caza es una de las razones principales por las que los gatos se escapan).

Al igual que los felinos grandes, tu león doméstico también sigue un horario de caza, banquete y sueño.

Como los gatos en la naturaleza son depredadores y presas, tiene sentido que necesiten mucha energía para cazar, traer la comida a casa y también estar alerta para evitar convertirse en una presa. Hasta los gatos más domesticados se dejan llevar por este impulso biológico.

Por eso, el sueño de los gatos es más ligero que el de los humanos y, en vez de dormir muchas horas seguidas por la noche, se echan muchas siestas a lo largo del día.

¿Cuánto duerme un gato?

Los gatos son criaturas dormilonas. De hecho, lo más probable es que el felino de tu familia se esté echando una siesta ahora mismo. Parece que tu amigo peludo duerme todo el día, pero ¿cuánto duerme un gato en realidad?

La cantidad exacta de horas que duerme un gato depende de factores como:

• Edad: los gatos mayores tienen menos energía y duermen más que los gatos jóvenes. Los gatitos, como los bebés, necesitan dormir mucho para crecer.
• Nivel de actividad: los gatos necesitan dormir más después de un día muy activo.
• Estado de salud: si tu gato padece alguna enfermedad, como demencia, su ciclo de sueño puede verse afectado.

¿Cuántas horas duerme un gato?

Según los veterinarios, los gatos suelen dormir entre 12 y 20 horas al día. Descansan de media 15 horas al día y el 40% de ellos duerme más de 18 horas al día. Sí, tu gato duerme el doble o el triple que tú. Además, según se vaya haciendo mayor, dormirá más.

💡 Consejo: Puedes descubrir cuántas horas duerme tu gato (y su nivel de actividad y la ubicación en tiempo real, entre otras cosas) con un localizador GPS para gatos.

Cuida la salud y la felicidad de tu gato

Asegúrate de que se ejerciten y descansen lo suficiente. Compara la actividad con gatos similares. Establece objetivos diarios compatibles con tu amigo peludo.

Ver localizadores GPS para gatos

¿Cuántas veces duermen los gatos?

Nuestros amigos felinos, a diferencia de nosotros, tienen un sueño polifásico. Esto significa que, en vez de dormir durante muchas horas seguidas, lo hacen varias veces al día. Por esta razón, a diferencia de ti, tu gato no duerme toda la noche, sino que se echa muchas siestas a lo largo del día. Estas tienen una duración de 50 a 113 minutos, o de 78 minutos de media.

¿Los gatos son nocturnos?

Si su gato no duerme por la noche, muchos papás y mamás se preguntarán si es nocturno. Lo cierto es que esto es un mito: los gatos son crepusculares, no nocturnos. Esto significa que son más activos al amanecer y al atardecer.

Si tu gato no te deja dormir, prueba lo siguiente:

• No les premies con juegos, ni comida, ni atención.
• Ayúdalo a jugar y a hacer ejercicio antes de acostarse.
• Si no estás en casa por el día, ten cosas que fomente su estimulación durante tu ausencia.
• Deja a tu gato en otra habitación por la noche, para que no pueda molestarte.
• Evita castigarlo si se porta mal.

¿Mi gato duerme demasiado?

Los cambios en los hábitos del sueño pueden ser normales, pero también pueden ser indicio de que tu gato está enfermo. Si notas que tu gato duerme más de lo normal y, además, no come, por ejemplo, puede que padezca alguna enfermedad.

Tu gato puede dormir más de lo normal si tiene:

• Sobrepeso
• Una enfermedad del riñón
• Sordera
• Hipotiroidismo
• Deficiencia nutricional
• Muchos años
• Demencia
• Depresión
• Una infección
• Diabetes
• Artritis
• Envenenamiento

Con Tractive GPS, puedes hacer un seguimiento del sueño de tu gato y descubrir si duerme más o menos de lo normal. De este modo, podrás detectar problemas a tiempo y cuidar la salud y la felicidad de tu gato.

¿Mi gato no duerme lo suficiente?

Si te preocupa que tu gato no duerma lo suficiente, presta atención a su comportamiento y ponte en contacto con tu veterinario si lo consideras necesario. Algunas enfermedades pueden hacer que tu gato duerma menos de lo normal:

• Hipertiroidismo
• Hipertensión
• Virus de inmunodeficiencia felina (FIV)

La falta de estimulación también puede provocar que los gatos duerman menos, en especial si están muy activos por la noche. Realizar actividades, jugar y hacer ejercicio al aire libre puede ayudarlos a dormir mejor.

¿Cuánto debería dormir mi gato?

Como hemos mencionado anteriormente, los gatos suelen dormir entre 12 y 20 horas al día. Los gatos bebé y los gatos mayores suelen dormir más que los gatos adultos sanos. Ponte en contacto con tu veterinario para saber cuánto debería dormir tu gato o haz un seguimiento del sueño con la app de Tractive GPS para hacerte una idea de lo que es normal. De este modo, podrás descubrir si se han producido cambios en sus hábitos de sueño e identificar problemas de salud a tiempo.

¿Cuándo deberías hablar con tu veterinario?

Habla con tu veterinario si tu gato duerme menos de 12 o más de 20 horas al día, o si sus hábitos de sueño cambian de manera repentina. También deberías ponerte en contacto con tu veterinario si no se despierta con facilidad o si muestra signos de enfermedad. En lo que respecta a la salud de tu gato: mejor prevenir que curar.