Si tu amiga de cuatro patas no está esterilizada, lo más probable es que tenga su primer celo entre los seis y doce meses de edad. A partir de ahí, pasará por este ciclo aproximadamente cada seis meses. Este es el momento en que puede reproducirse y quedarse embarazada. Por eso es tan importante conocer las señales más comunes de una perra en celo, especialmente si quieres evitar una camada no planificada.

Descubre los 14 síntomas más comunes de una perra en celo y prepárate para esta etapa.

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¿Cuándo entra una perra en celo?

Las perras entran en celo por primera vez cuando alcanzan la pubertad: es decir, cuando se vuelven sexualmente maduras y pueden reproducirse. Esto suele ocurrir hacia los seis meses, aunque varía según la raza.

Las razas pequeñas tienden a tener su primer celo antes, mientras que las razas grandes o gigantes pueden tardar entre 18 y 24 meses.

El celo en las perras domésticas puede ocurrir en cualquier época del año, independientemente de las estaciones. La única excepción son las razas Basenji y mastín tibetano, que suelen entrar en celo durante la primavera.

¿Cuánto dura el celo en las perras?

El celo, o fase de estro, suele durar entre 3 y 21 días. La media de duración es de 9 días.

Comportamientos comunes de una perra en celo

1) Inflamación de la vulva

Uno de los signos físicos más evidentes es la hinchazón de la vulva (la parte externa de la vagina). Esta inflamación aparece en la fase inicial del ciclo y puede ser más o menos notoria dependiendo del tamaño y de la raza del perro.

Si notas que los genitales de tu perra parecen más grandes de lo normal, es probable que esté en celo.

2) Secreciones y sangrado

Otro signo muy claro del celo es la secreción con sangre. Esta aparece al mismo tiempo que la inflamación, durante la fase de proestro o primera etapa del ciclo.

Conoce las cuatro fases del celo

Observarás una secreción vaginal de color rosado a marrón rojizo. Al igual que la hinchazón, la cantidad de sangrado varía entre perras. Por lo general, comienza de forma leve y aumenta a mediados de la semana.

3) Lamidos excesivos

Es normal que las perras se laman para mantenerse limpias. Pero si tu amiga peluda no está esterilizada y comienza a lamerse constantemente sus partes íntimas, es una clara señal de que está en celo.

Esto es porque la inflamación y el sangrado les provoca incomodidad.

Si el flujo es muy abundante, puedes plantearte usar pañales para celo y toallitas para perros.

4) Cola entre las patas

Durante la fase temprana del celo, muchas perras mantienen la cola metida entre las patas. Es una forma de proteger su zona íntima antes de estar listas para aparearse.

perro tumbado en la hierba al aire libre siendo acariciado por una mujer

5) Busca más atención

Una perra en celo suele estar más pegajosa de lo normal. Tal vez tu peluda, que suele ser independiente, ahora busca más mimos, caricias o simplemente estar cerca de ti. Este deseo de contacto es totalmente normal.

6) Cambios en la forma de orinar

Una perra lista para reproducirse puede modificar su comportamiento al orinar:

  • Orina con más frecuencia
  • Levanta la pata de forma diferente (especialmente si hay un macho cerca)
  • Orina cerca de otros perros machos

Esto le sirve para “marcar territorio” con su olor y atraer posibles parejas.

perro al aire libre saltando en la hierba

7) Alteraciones en la actividad

Una perra en celo puede volverse más inquieta, activa o incluso nerviosa. Es común que esté más inquieta, camine sin parar o le cueste relajarse debido al cambio hormonal.

Sin embargo, algunas perras también pueden mostrarse más cansadas de lo habitual.

Perro llevando el localizador Tractive GPS para perros fuera en un campo, pantallas de la app Tractive GPS en primer plano

Para llevar un control de su nivel de actividad y salud, puedes usar un GPS y monitor de salud para perros como el localizador GPS de Tractive.

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8) Llamar la atención de perros machos

Durante el celo, las perras liberan feromonas que atraen a los machos. Si notas que tu peluda recibe más atención de perros de lo normal, es posible que esté en celo.

Incluso los perros castrados pueden mostrar interés. Por eso es importante vigilarla cuando esté al aire libre para evitar encuentros indeseados.

9) Cambios en la postura y la cola

Cuando llega a la fase de estro, la perra está lista para aparearse. Lo demuestra adoptando una postura receptiva y levantando ligeramente la cola hacia un lado, sobre todo si alguien la toca.

10) Monta y comportamiento de empuje

Sí, las perras también pueden montar. Durante el celo, es común que intenten montar a otros perros, personas o incluso juguetes suaves. Aunque pueda parecer raro, es una forma natural de liberar tensión.

Una perra en celo oliendo a otro

11) Se vuelve más amigable con perros machos

Una señal clara de que tu peluda está en celo es que tolera (e incluso disfruta) la cercanía de perros machos. Por ejemplo, permite que la huelan o le laman la vulva, cosa que normalmente no permitiría.

También puede mover la cola de forma exagerada, indicando que está abierta al contacto.

12) Intentos de fuga

El instinto de apareamiento es una de las razones más frecuentes por las que los perros se escapan. Si tu peluda intenta huir de casa o saltar la valla, probablemente esté en celo.

Para mantenerla segura:

  • Colócale un microchip
  • Usa un buen localizador GPS para perros
  • Sácala a pasear siempre con correa
  • Considera esterilizarla para evitar futuras escapadas

Recuerda que una perra en celo puede volverse más terca y no obedecer tan fácilmente cuando la llamas.

13) Cambios en el apetito

Durante el celo, algunas perras pierden el apetito, mientras que otras comen más de lo habitual. Ambas reacciones son normales y dependen de cada perra.

Lo importante es seguir dándole una dieta equilibrada y observar cualquier cambio repentino.

Lee más: ¿Tu perro no quiere comer? 6 causas comunes

14) Ansiedad, inquietud y comportamiento de “nido”

Algunas perras se vuelven más ansiosas o incluso agresivas mientras están en celo. También pueden mostrar conductas de “nido”, como preparar un sitio para tener cachorros, aunque no estén embarazadas.

¿Cómo cuidar a una perra en celo?

Con todas estas hormonas alborotadas, cuidar de tu amiga de cuatro patas en celo puede ser un reto. Los expertos recomiendan:

  • Usar un microchip y un localizador GPS
  • Llevarla siempre con correa
  • Considerar la esterilización para evitar futuros celos

Conclusión

Identificar si tu peluda está en celo no es difícil si conoces los signos. Cambios en su comportamiento, intentos de fuga, mayor atención hacia perros machos y otros síntomas pueden ser pistas claras.

Ahora que sabes cuáles son los síntomas comunes del celo, estarás mejor preparado para acompañarla y cuidarla en esta etapa tan natural de su vida.