Mi perro no bebe agua: las 5 razones más comunes y soluciones
Descubre por qué tu perro no bebe tanta agua como debería y aprende a evitarlo con nuestros útiles consejos, para que siempre esté bien hidratado y a salvo.
Por más que lo intentas, tu perro no bebe agua y no sabes el motivo. No te preocupes: no estás solo. La mayor parte de los perros beben la cantidad de agua necesaria para mantenerse bien hidratados, pero puede pasar que a veces no tengan sed. Este artículo te ayudará a entender por qué tu perro no bebe agua y a aprender cómo evitarlo. Y si tampoco come, te contamos las posibles razones.
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¿Es el agua importante para tu perro?
Los perros, al igual que los humanos, necesitan beber agua a diario para no correr el riesgo de deshidratarse. Incluso corren más riesgo que las personas, pues liberan el calor de su cuerpo con más lentitud. Los perros tienen varias glándulas sudoríparas en las almohadillas de las patas, pero no las suficientes como para refrescar el cuerpo. Además, controlan su temperatura corporal mayormente jadeando.
En otras palabras, el agua es esencial y las personas que compartimos nuestra vida con amigos peludos tenemos que encargarnos de que se hidraten lo suficiente.
¿Cuánta agua necesita un perro?
Por lo general, la cantidad de agua que necesita beber un perro es igual a:
100 ml de agua por cada kg de peso corporal
Sin embargo, hay que tener en cuenta otros factores para calcular con más precisión la cantidad diaria de agua que necesita un perro. El Dr. Jürgen Zentek, director del Institute for Animal Nutrition de la Universidad de Berlín, creó distintas fórmulas que se basan en el tamaño del perro, el nivel de actividad, la temperatura y el tipo de comida. Partiendo de esta base, hemos creado esta tabla con la cantidad de agua diaria que necesita un perro.
5 razones por las que tu perro no bebe agua
A veces, nuestros amigos peludos no beben agua por las siguientes razones:
- Inactividad o falta de ejercicio
- Entorno desconocido
- Enfermedades
- Envejecimiento
- Miedo y experiencias negativas
Vamos a ver estos motivos en detalle.
1. Inactividad o falta de ejercicio
Si hace fresco y tu perro se ejercita menos de lo normal, entonces no bebe agua porque básicamente no tiene tanta sed. Si este es el motivo, no tienes de qué preocuparte. Una ligera disminución del consumo de agua debido a una menor actividad no es motivo de alarma. No obstante, ponte en contacto con tu veterinario si esto persiste.
Los perros no deben pasar más de un día sin agua.
Como el ejercicio físico habitual es esencial para la salud de tu querido compañero de aventuras, puedes informarte de la frecuencia con la que tienes que pasearlo o empezar a controlar su actividad con un localizador GPS con seguimiento de actividad para perros.
2. Lugares desconocidos
Puede que tu amigo de cuatro patas no beba porque se encuentra en un sitio desconocido o no conoce los olores. Gracias a su agudo sentido del olfato, los perros saben distinguir entre fuentes de agua conocidas y desconocidas. Así que si no reconoce el olor del agua, puede que no quiera beberla. ¿Estás planeando un viaje a un lugar nuevo? Esto es lo que has de tener en cuenta:
- Llévate una botella de agua de casa
- Observa el comportamiento de tu perro a la hora de beber agua
- No le pierdas de vista en ningún momento
3. Enfermedades
Algunos problemas de salud pueden impactar en la sed de los perros. En algunos casos, las enfermedades renales u otras como la diabetes pueden hacer que las ganas de beber agua disminuyan por completo.
Las infecciones de vejiga o del tracto urinario también pueden provocar una disminución de la sed.
Por lo tanto, si crees que la falta de sed de tu perro se puede deber a alguna enfermedad, ponte en contacto con el veterinario de inmediato. No está de más que anotes el comportamiento de tu amigo para que tu veterinario pueda detectar el problema de tu perro con la mayor precisión posible.
4. Envejecimiento
Por una parte, los perros de edad avanzada también beben menos agua. Puede que llegar al cuenco de agua les suponga demasiado esfuerzo o que simplemente sientan menos necesidad de beber y comer.
Los perros mayores hacen menos ejercicio, por lo que puede que tengan menos sed.
No obstante, los perros más mayores necesitan mantener unos niveles de hidratación adecuados, por lo que si beber se está convirtiendo en un problema, optar por una alimentación más húmeda puede ser de ayuda. Eso sí, ponte en contacto con tu veterinario antes de cambiar la alimentación.
5. Miedo y experiencias negativas
Los perros aprenden por asociación. Si experimentan miedo o dolor, suelen asociar esos sentimientos negativos con las circunstancias en las que los experimentaron por primera vez. Es decir, que si tu perro ha tenido una mala experiencia al beber del cuenco de agua, o por ejemplo alguien le pisó accidentalmente la cola o la pata, puede que asocie esos recuerdos negativos con la acción de beber. Para quitarle el miedo, puedes intentar usar un cuenco de agua nuevo o colocarlo en un lugar diferente.
Si mi perro no bebe agua, ¿puede beber leche?
Cuando son unos cachorros, muchos animales producen la enzima de la lactasa, responsable de descomponer la lactosa. En general, tras la lactancia, muchos perros pierden esta enzima y ya no son capaces de metabolizar la lactosa.
En otras palabras, es importante dejar de darle leche a tu perro en cuanto deje de ser un cachorrito.
Síntomas de la intolerancia a la lactosa:
- Dolor de estómago
- Malestar general
- Diarrea
- Flatulencias
Los productos fermentados (como el queso duro, el yogur o el suero de mantequilla) contienen una menor cantidad de lactosa. Por ello son menos perjudiciales.
En el proceso de fermentación se añaden a la leche varios suplementos, como bacterias, que convierten la lactosa en una sustancia más digerible.
Algunos perros toleran mejor la leche que otros. Esto incluye sobre todo a los perros guardianes de ganado, ya que los productos lácteos solían ser los únicos disponibles. Por tanto, en caso de que quieras darle a tu perro leche además de agua (no como sustitutivo), asegúrate de elegir una leche sin lactosa.
Cómo hacer que tu perro beba más agua
Es necesario que los perros beban agua con regularidad. De lo contrario, podrían deshidratarse. Si tu perro no bebe tanta agua como antes, prueba alguna de las siguientes opciones:
- Cambia la posición del cuenco: a veces el simple hecho de cambiar la posición del cuenco de agua puede funcionar.
- Mezcla la comida: otra solución es mezclar la comida húmeda para perros con agua. Aunque el perro no beba del cuenco, puede que sí le guste tomar agua si está mezclada con la comida.
- Limpia el cuenco de agua: también conviene asegurarse de que el cuenco de agua esté limpio. Es algo simple, pero puede funcionar.
- Cambia el cuenco de agua: intenta evitar los cuencos de agua de metal, quizás a tu perro le asuste el ruido. Es mejor usar un cuenco de cristal.
- Coloca más cuencos: pon varios cuencos de agua por toda la casa.
- Contacta con el veterinario: si tu perro sigue sin beber agua, o si padece alguna enfermedad, ponte en contacto con un veterinario lo antes posible. En caso de enfermedad, una hidratación adecuada es importante para el proceso de recuperación, por lo que es esencial que tu mascota reciba ayuda profesional.
Información sobre cuánta agua necesita realmente tu perro
Cada perro es un mundo, y no todos necesitan beber la misma cantidad de agua. Si te preguntas la cantidad diaria de agua que necesita, depende del peso, la dieta alimentaria y el nivel de actividad. Échale un vistazo a la tabla que aparece al principio de este artículo para hacerte una idea.
Además de las recomendaciones anteriores, si quieres más ideas para hacer que tu perro beba más, observa el siguiente vídeo: